Resultados e impactos esperados:

Obtención de ácidos húmicos y antioxidantes a partir del bio-oil y de biochar provenientes de diferentes tipos de biomasa. Durante el proyecto se prevé utilizar 1.000 toneladas de biomasa forestal (reducción de 1.057 toneladas de CO2 en sustitución a los combustibles fósiles). La biorrefinería convertirá 100 toneladas de biomasa en 25 toneladas de biochar y 50 toneladas de bio aceite, con un total de polifenoles (antioxidantes) de 70 g de ácido gálico eq. por Kg, según las condiciones de operatividad y la materia prima.

Implementación de 45 ha de rodales forestales pilotos (15 ha de pino blanco, 10 ha de matorrales y 10 ha mixtas, con un total de 1350 toneladas de biomasa) en diferentes zonas demostrativas y transferencia de técnicas forestales innovadoras a partir de las especies seleccionadas y de la biomasa (ej. corteza).

Mejora de la viabilidad económica de bosques post incendio de pino blanco y alcornoques en combinación con la producción de corcho y gestión del sotobosque. Se espera aumentar la viabilidad económica a través del precio de los antioxidantes en el mercado y que permitirá impulsar la gestión forestal de estos bosques. Los polifenoles tienen una capacidad antioxidante que se incorpora como ingrediente funcional en alimentos, cosméticos y se utiliza también en la industria farmacéutica. Estos productos tienen un mercado creciente con precios entre los 30 y los 175 € / kg.

Comunicación y transferencia: 1 jornada final, 2 sesiones de puertas abiertas dirigidas a todos los interesados, 3 participaciones en conferencias europeas y 3 a nivel nacional. 3 experiencias de networking y diferentes jornadas de diseminación de los roles de la biomasa. Se producirán también folletos divulgativos, una página web del proyecto, perfil en redes sociales, 8 newsletter y apariciones en los principales medios de comunicación. Se publicarán 4 artículos científicos. Se utilizará el formato digital lo posible para reducir la huella de carbono.

Mejora de la salud y productividad de los bosques gestionados (incremento del índice de crecimiento y del contenido relativo de agua al follaje) y reducción de su vulnerabilidad al cambio climático.

Mejora de los servicios ecosistémicos tales como la regulación del agua y la capacidad de secuestro de carbono.

Reducción del riesgo de incendios de los bosques de pino blanco, alcornoques y matorrales a través de la reducción del combustible y el incremento del contenido de agua relativa de la vegetación restante.

Proveer a las administraciones forestales y usuarios privados de herramientas económicas, sociales y medioambientales de apoyo a la toma de decisiones para ser adaptadas en políticas forestales para hacer frente al cambio climático y mejorando así el marco legislativo.

Creación de una economía rural y local más activa con beneficios sociales: como mínimo se generarán 3 puestos de trabajo directos (biorrefinería), así como indirectos a partir de los trabajos forestales (6 salarios por ha).

Incremento del conocimiento y concienciación del público en general y de los diferentes actores europeos de los problemas planteados y de las soluciones propuestas en el proyecto.